La caída.

Una mina en la base. Onomatopeya de explosión. Acá estoy, polimorfo, omnipresente. Para vos. Hablame, expresame todo. También necesitas explotar conmigo. Sino, seguirás llenándote de dudas y no me tendrás junto a vos para explotarme.
En la cima, adorado. ¿Q pasa ahora? ¿A dónde vas? Vení aquí, acá. Permitime ir, pedime. Te otorgaría mi vida si fuera necesario. Creelo, pensalo, sabelo.
Aceptalo, ciego. Es gratis. ¿Q no ves?
No daña ¿Q no ves?
Me ayuda ¿Q acaso no querés ver?
Deprimite. Eso no llama mi atención ni me genera lastima. Solo me dolería que aun así, por mas q esté presente, tu sentir no cambie mas q por unas pocas horas para q, en mi abandono inevitable, vuelvas a lo de antes.
Entonces ahí si. Perdí mi tiempo.
Demostrame lo contrario. Ciego…